En nuestra peluquería felina en Eixample, Barcelona conocemos de primera mano los riesgos y dificultades que puede traer bañar a un gato adulto, especialmente si es su primera vez. Es cierto que algunos gatos pueden encontrar el agua curiosa o agradable, pero la mayoría se revolverá y tratará de huir despavoridos ante su proximidad. Por eso es importante contar siempre con profesionales.
Algunas personas te podrán decir que lo más recomendable es no bañar nunca a los gatos. Sus propios hábitos de aseo son más que suficientes. Sin embargo, si se da la situación en que debas hacerlo, debes tener en cuenta que el gato debe ser mayor de los tres meses de vida y estar debidamente vacunado, pues un baño puede hacerlo enfermar muy fácilmente.
Una vez sabido esto, si decides hacerlo en casa, ten en cuenta que debes afrontar la tarea con absoluta calma. El gato puede sentir tu propia inquietud y predisponerlo a la resistencia. Si puedes contar con otro miembro de tu familia o alguien de confianza para bañarlo entre dos, mejor que mejor. En todo momento es imprescindible que seas cariñoso con tu gato y que le digas palabras cariñosas y suaves, sin forzarlo demasiado.
El agua que utilices debe ser lo más parecida posible a la temperatura ambiente, ni más caliente ni más fría. Ten en cuenta que el gato, especialmente en una bañera, puede necesitar arañar o agarrarse a algo para liberar cierto estrés; prepárale una toalla en el borde en la que pueda clavar las uñas.
Realiza siempre los baños de cuello para abajo, sin mojarle ojos, nariz ni orejas. Y procura no usar el chorro directo del grifo o la ducha sobre él, pues seguramente le asustará.
Si a pesar de estos consejos necesitas ayuda con el baño o el cuidado de tu gato, puedes contar con Clínica Veterinaria Fort Pius, porque tienes a tu disposición y a la de tu peludo a nuestros profesionales de la peluquería felina en Eixample, Barcelona.